¿Te estás cuidando? ¡Adaptá tu platos para las fiestas!

¿Te estás cuidando? ¡Adaptá tu platos para las fiestas!

Para estas fiestas, te acercamos algunas ideas para innovar en las recetas clásicas de siempre.
Una alternativa un poquito más liviana, divertida y creativa.

VITEL TONÉ x PECETO CON QUESO CREMA

Por ser una entrada fría, el vitel toné parece un plato ideal para nuestras calurosas fiestas. Y ciertamente es una comida fresca, pero no liviana. Su salsa a base de crema de leche con alcaparras, anchoas, mostaza y huevo duro eleva a casi 800 calorías por cada abundante plato. En cambio, si reemplazamos la salsa por un mix de vegetales, el plato pierde la mitad de calorías y conserva un riquísimo e innovador sabor. El peceto se mecha con hierbas y tomates secos, cortado en fetas con queso crema y condimento de sal, pimienta, ralladura de lima y alcaparras procesadas. Total: 400 calorías. Una opción nutritiva, creativa y súper livianita, ya que el corte de carne es magro.

ENSALADA RUSA x RUSITA LIGHT

La ensalada rusa es un clásico que nunca falta en las fiestas. Una porción abundante posee cerca de 600 calorías. Pero si reemplazamos la mayonesa por una cucharada de queso crema light con jugo de limón, obtendremos la mitad de calorías. También podemos aumentar la cantidad de zanahoria, en relación a la ración de papas, para hacerla aún más liviana.

PAN DULCE x CUPCAKES CON FRUTAS FRESCAS

El pan dulce tiene muchas más calorías que el pan blando, ya que se elabora con manteca, huevo, leche entera, azúcar y frutas secas. Estamos hablando de cerca de 500 calorías cada 150 gramos. En este caso, una excelente opción son los cupcakes, hechas como mini pan dulces. Los podemos preparar con frutas secas y ralladuras de cítricos, y así bajar en un 25% las calorías, además de tener una alternativa innovadora y creativa.

CLERICÓ x LIMONADA CON JENGIBRE Y MENTA

El clericó es una bebida macerada de alto valor calórico, producto de la combinación de vino y frutas. La propuesta es dejar el alcohol para la copita del brindis y, durante la cena, innovar con una bebida que lleve poca azúcar, como una fresca limonada con jengibre y menta.